sábado, junio 09, 2007

A la que me hizo libro*


Ente maleable ser siempre procuro
para así encontrar sensaciones nuevas.
He sobrevivido a inéditas pruebas
que se presentan si acierto el conjuro.

Mas superar tu manera es seguro,
por cómo me sublimas y me elevas,
porque te vuelves un árbol de levas,
que para el siguiente amor será duro.

Me habían vuelto instrumento musical,
diosa, heroína, estatua, cortesana;
pero nadie había franqueado el umbral
de volverme un soneto de Sor Juana.
Libro y cuerpo se tornan manantial
confluyendo en las manos de Mariana.

1 comentario:

Anónimo dijo...

Esta pocamadre este texto, hasta se me puso la piel chinita cuando recorde como me lo comentaste. Daniel.