miércoles, junio 10, 2009

Pobrecita eternidad.*

Hoy hay que escribir.

No hay qué escribir, pero hay que escribir.

Porque hoy lloro como nunca he llorado. No en cantidad; ya he llorado mucho más; ya he llorado insuperablemente mucho.

Pero hoy mi llanto es nuevo.

Antes lloraba de desesperación. Antes pensaba qué hacer mientras lloraba. Hoy no. Hoy lloro con la nauseabunda sensación de resignación.

Hoy lloro y no pienso qué debo hacer, porque no puedo hacer nada.

Decido someterme a la circunstancia. Acepto la muerte presente y futura.
Acepto ver lo infinito como si fuera finito. Pobrecita eternidad.

"¿Y si la historia se detiene aquí y se nos quedan estos besos no besados y los archivos desordenados?
¿Y si la historia se detiene aquí y no podemos resolver nuestro misterio?
¿Si no te veo ni un poquito más?"

2 comentarios:

Exenio dijo...

Siéntete acompañada... si es tu deseo.

...V_V

Revista Intravenosa, literatura subcutánea dijo...

Culta Cabaretera:
¿Me haría el honor de enviarme alguno de sus ensayos para publicarla en el número 3 de la revista que edito?
atte,
e.
pd. laintravenosa@gmail.com
pd2. Nostálgico.