Causa y efecto. En donde explico por qué ya no se ve encimado mi blog.*

Que si el karma, que si el drama.
Total que nada sale bien.

Hubo un tiempo en el que tenía coche. Justo venía yo de cobrar una súper chamba en la que por hora y media me dieron 400 pesos (y eran tiempos de...uf...apretarse la tripa), así que venía manejando feliz y hasta optimista.

Cuando tenía coche procuraba ser cortés, pero ese día que pensé que me ganaría el premio a la amabilidad, fue cuando una camioneta a mi lado izquierdo trataba de salir de su cochera y, como yo estorbaba, consulté mi retrovisor y me eché en reversa. Justo en ese segundo, se asomó un coche carísimo (no recuerdo qué coche era, los olvido con frecuencia) por atrás de mi lado derecho y le rompí una calavera. En el momento creí que le había dado a la banqueta, porque cuando vi los espejos no había nada, así que seguí mi camino...unos metros. Porque de pronto me interceptaron dos coches con derrapón y todo (hasta pensé que era un secuestro) para cobrarme su calavera carísima.

-Brother, tú tienes lana para traer un coche cuyas calaveras cuestan eso; yo traigo dos billetes que me tienen que durar por lo menos una semana. Échame la mano, te las pago poco a poco.
-Bla bla bla bunga bunga.
-Ok.

Otro día, también cuando tenía coche, afuera de mi casa había unos, mmm, unas personas empujando otro coche. “Ay, pobres. Y tan oscura que está esta calle. ¿Necesitan algo?” Bueno, los empujé, mi coche quedó jodido y fue lo que provocó que meses después le robaran la placa y que para reponerla tuviera que ponerlo a mi nombre (una lanota) y luego pagar la placa. Y también (para variar) eran tiempos de apretarse la tripa, así que lo vendí.

Hoy no tengo coche, no se me han regresado mis buenas acciones, pero ¡tengo un blog! Oh, qué felicidad. Lo voy a cuidar mucho, así como cuido mi lenguaje, mi ortografía, que son a mi parecer de los dones más preciados que alguien puede tener. Voy a unirme a la campaña a favor de escribir con una correcta ortografía en los blogs. Ay, qué bien, qué orgullosa me siento. La frase que nos define: “Eres lo que escribes, eres como escribes.” Uy, qué belleza. Así como se vea mi blog, así soy yo.

¡Pondré el distintivo en mi plantilla y el mundo verá cómo soy!

VOZ EN OFF DE LAS DIOSAS: Pero ladelcabaret, ¿no te das cuenta de que nada va a salir bien? ¿No te has dado cuenta de que estás destinada sólo a la felicidad del escenario? En cuanto te bajas de él, todo sale mal. Para que lo entiendas de una vez por todas, hasta que no quites ese distintivo mamón, tu blog se verá encimado; porque como se ve tu blog, es como eres tú.

Bueno.
Ya lo quité.
...
Ash.

Este era el distintivo:

Chulo, ¿no?